Babel

'Amores Perros' fue para mí una de las películas sorpresa del 2000, una de esas que vas a ver casi sin saber qué esperar y de las que sales con muy buen sabor de boca. Con una estructura narrativa parecida a la de Pulp Fiction (entre otras muchas películas) conseguía sin embargo alejarse de ese modelo y contar una historia con entidad propia y bastante interesante.
Cuando me enteré de la existencia de '21 Gramos' ya sabía que Iñárritu era capaz, como mínimo, de hacer algo como 'Amores Perros'. Y no me decepcionó. Me gustó, y mucho, su segunda película, la primera en Hollywood, y me quedé con ganas de más.
Pero no de más de lo mismo y, lamentablemente, eso es lo que nos encontramos en Babel. Iñárritu vuelve a utilizar el mismo esquema narrativo (historias que se cruzan entre sí y crean un puzzle en el que todas las piezas acaban por encajar) y, si bien es cierto que no hay fisuras en la historia, también lo es que el producto final no acaba de funcionar. Dos de las historias están bastante relacionadas entre sí (la de Brad Pitt y Cate Blanchet y la de Gael García Bernal) y funcionan bien, y la tercera, la que más me gustó, parece un pegote. Y es una pena.
Por una parte tenemos dos historias con claros puntos de contacto y bien narradas, y por el otro una historia que parte de una premisa muy interesante (la historia de una chica japonesa sorda y cómo le afecta la sordera en su relación con el mundo), que está muy bien rodada... pero que no casa con el resto de la película.
La película recorre medio mundo, está rodada con diálogos en 4 idiomas (árabe, castellano, inglés y japonés... si sois de los que no soportan los subtítulos en pantalla, no os recomiendo que vayais a verla) y dura dos horas y media. Y le sobra metraje.
La historia de la adolescente japonesa da casi para una película por sí misma, y las otras dos podían haberse desarrollado algo más. Desde luego a Iñárritu no le falta ambición al rodar la película pero, por desgracia, se queda en una declaración de intenciones, no acaba de cuajar. Si sois de los que disfrutan con los experimentos, aunque sean fallidos, disfrutaréis de la película. Si no, ojo, que aunque la película no está mal del todo, la decepción puede ser de las gordas...